El cielo de la Justicia se encuentra totalmente empañado por la impunidad. La visibilidad varía según el bolsillo del cliente. La temperatura mínima esta pautada por la indiferencia gracias a los analgésicos que diariamente nos obligan a consumir las empresas masivas de manipulación.
La temperatura máxima se mueve con los hilos de intereses de la mafia política económica que impone vivir sin dignidad y morir de olvido.
Varias pestes trae consigo este inconstante cambio climático electoral. Una epidemia particular que se autorecicla cada 5 años con casos crónicos de presencias dictatoriales, con síntomas de "Paz y Progreso", caudillismo mesiánico e inexistencia de oposición.
Muchas son las personas que se siguen asfixiando y quemando por este "Estado de Derecho" tan torcido por mercaderes y asesinos que deambulan en libertad y descaradamente osan dar cátedras de valores éticos y principios morales.
Pero soplan otros vientos ante la sequía originada por los que pretenden poner precio a nuestras vidas.
Se pronostica un cielo despejado y vacío de injusticia.
La presión atmosférica crece desde la gente en las calles.
Lentamente se acerca la primavera que luego de una fuerte tormenta permaneceran abiertas las puertas de la lucha por la vida.
¡NO TENEMOS MIEDO! ¡SILENCIO NUNCA MÁS! ¡NO AL OLVIDO SI A LA JUSTICIA! ¡NI OLVIDO NI PERDON!
¡LAS PUERTAS SE CERRARON LOS PAIVA LO ORDENARON!
Christian Olmedo
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